BIOGRAFÍA

Desde muy joven, Verónica Rico demostró una profunda vocación por el arte. Impulsada por una inquietud inquebrantable, salió literalmente a la calle en busca de maestros que pudieran guiarla en el mundo de la pintura. Su perseverancia la llevó a encontrar el apoyo de destacados pintores como Enrique Samaniego, Adriana Peña y el pintor German Vázquez, quienes dejaron una huella significativa en su formación artística.

A los 16 años, Verónica alcanzó un hito en su carrera al participar en la Primera Bienal Paso del Norte en 1996, donde dos de sus obras fueron seleccionadas, un logro que marcó el inicio de una trayectoria llena de creatividad y compromiso.

Diseñadora gráfica y pintora, Verónica Rico utiliza el arte como un medio para plasmar sus ideas y emociones, buscando generar un impacto positivo en quienes contemplan sus obras. Su enfoque se centra en interpretar emociones y experiencias humanas, invitando a la reflexión y ofreciendo soluciones simbólicas a problemas cotidianos. Verónica cree firmemente en el poder del arte para inspirar y sanar, como lo demuestra en sus lienzos y diseños llenos de color, formas abstractas y personajes simbólicos.

En su exposición Entre Ideas y Emociones, Verónica explora temas emocionales profundos como la angustia, el dolor y la tristeza, pero siempre con un mensaje esperanzador. Una de sus obras destacadas, Ya Basta, retrata a un personaje femenino del que emerge una explosión de color desde el pecho, simbolizando la liberación de la fuerza interior para superar situaciones adversas.

Verónica también ha abordado problemáticas como el desapego, la obsesión y la codependencia emocional en exposiciones como Sentimientos Reciclados, presentada en el Museo del Chamizal. A través de 24 obras, invita al espectador a romper patrones de pensamiento que no conducen a soluciones y a adoptar nuevas perspectivas para superar obstáculos.

La propuesta artística de Verónica Rico trasciende el lienzo; sus obras son un diálogo con el espectador sobre las emociones y la psicología humanas. Con cada trazo, Verónica denuncia los efectos negativos de las acciones humanas en la sociedad, mientras promueve la importancia de transformar lo negativo en positivo.

Comprometida y apasionada, Verónica Rico continúa desarrollando su arte como una herramienta de expresión, reflexión y cambio, conectando con la esencia emocional de quienes observan su obra y dejando una marca en el panorama artístico de Ciudad Juárez y más allá.